Una de cal

Pasó la Diada, plena de controversias, y el referéndum de Arenys, todo un detalle. La vuelta alcole, la Rentrée, pasada por agua y con el puntillo de los portátiles. Pero hay algo que es de fondo y a nadie se le ocurre señalar: El déficit de autoridad-respeto por las personas mayores, sobre todo responsables en algún sentido de la educación de esa juventud díscola que todo lo ve fácil En realidad no ha cambiado mucho el trasfondo en muchas generaciones, el/la joven se siente con la fatua seguridad que le proporciona el vigor de su juventud, pero su terreno es inseguro pues aún no tiene ni idea de lo que le depara la vida. Eso le hace ser más desfiante para darse seguridad y le resta aplomo en su trato con las personas mayores,
Lo que sí ha cambiado ,y mucho, es la edución,el respeto debido a personas que, por el hecho de llevar más tiempo en el mundo tienen mucho que decir y enseñar, al menos orientar;el principio de autoridad, autoridad moral, se ha perdido y eso hace que los recién llegados a este mundo pierdan una herramienta de choque para digerir el empacho de información que nos invade. Ya no son los tiempos de ordeno y mando, pero para que un barco funcione tiene que haber alguien que lleve el mando, y no va a ser el grumete, precisamente.
Los valores que dan fuerza a una sociedad se basan en tener memoria y respeto por los logros alcanzados en el PASADO, que sirven de trampolín para afrontar el FUTURO desde un PRESENTE sólido